Compartimos lecturas con los autores


2015 - FRANCISCO DÍAZ VALLADARES VISITA NUESTRO COLEGIO


El martes 23 de marzo, y con motivo de la celebración de las semana de la lectura, recibimos en nuestro colegio al escritor Francisco Díaz Valladares,  para comentar con los alumnos de 1º, 2º, 3º y 4º de ESO cuatro de sus novelas: Terror bajo los hielos, La venganza de los museilines, El último Hacker y A orillas del mal.


Paco, como así le gusta que le llamen, ha dedicado gran parte de su vida a recorrer mundo. Comenzó viajando por EEUU y México, y posteriormente se mudó a Medio Oriente, donde residió en Jordania. También ha visitado Grecia, Turquía, Siria, Francia, Yugoslavia... Según él, llegó un momento en que estaba tan lleno de historias que necesitaba compartirlas con los demás, así se convirtió en escritor.

Sus obras son una proyección de sus experiencias vitales, como se refleja en La venganza de los museilinesdonde nos acerca a las costumbres de los musulmanes. Los alumnos se interesaron por saber hasta dónde había sido conocedor de estas costumbres y de si había tenido alguna experiencia con el Ramadán. "La sensación de ver cómo una ciudad como Amán, de dos millones de personas, se paraliza, se silencia y a continuación rompe a cantar al final del día cuando se levanta el ayuno, es indescriptible y maravillosa"- comentó con entusiasmo al recordar.


Con El último Hackerfinalista en el Premio Jaén de novelas, afirmó que pretendía transmitir el peligro que suponen para la sociedad estos individuos, capaces de acceder a la red por la puerta de atrás y destrozarlo todo.




Es un escritor que necesita impregnarse de sus novelas, algo que supo transmitir estupendamente a los alumnos haciéndoles vibrar con anécdotas sorprendentes, como las que contó al hablar de su novela A orillas del mal, adaptación de La barca del pan, obra que trata del problema del narcotráfico en La Línea de la Concepción. Para documentarse sobre el tema, pasó una semana en la cárcel de Algeciras, convivió con la mafia y acompañó a la guardia civil costera mientras patrullaba. Y es que hasta las paredes de la sala vibraban con la emoción de Paco narrando aquellas historias.  Ante la pregunta de los chicos sobre qué le había dado más miedo, respondió que no había nada peor que sentir las puertas cerrándose tras de ti cuando entras en una prisión, porque sientes que la libertad se aleja.


Sobre su labor como escritor explicó que, cuando comienza una novela, se impregna de todo lo relacionado con ella y se sumerge en la historia, sin olvidar que uno debe siempre escribir para sí mismo; aunque a veces son los personajes los que te llevan de la mano, y entonces el escribir se convierte en una experiencia mágica.

Pero escuchar a Paco es, sobre todo, una lección de vida, de "arañarla"- según él-, porque es un regalo que hay que aprovechar haciendo cosas nuevas a cada momento.Y, como decía su abuela, "coger todos los trenes que pasen, pues si no te interesan, puedes bajarte en la siguiente parada, pero si los dejas pasar, nunca volverán".

Todos hemos disfrutado de este encuentro y siempre recordaremos sus sabias palabras: "Siembra un sueño, riégalo inteligentemente y cosecharás una realidad". Finalizó las charlas firmando y dedicando sus libros. Le agradecemos enormemente su visita y, especialmente, la ilusión y el cariño que supo transmitirnos a los que tuvimos el placer de escucharle.








2014 - ALFREDO GÓMEZ CERDÁ visita el Colegio Divina Pastora

                        “La vida es algo que me inspira constantemente”


Con motivo de la vigésima edición de la “Semana de la Lectura”, el Colegio Divina Pastora recibió el pasado 10 de febrero al escritor Alfredo Gómez Cerdá para comentar su novela El rostro de la sombra. Con este libro recibió el Premio Hache 2013 de la Concejalía de Juventud del Ayuntamiento de Cartagena, un premio muy especial otorgado por el público juvenil. Como escritor de literatura infantil y juvenil ha sido galardonado con diversos premios entre los que destacan el  Premio Cervantes Chico (2008) por el conjunto de su obra y el Premio Nacional de Literatura Infantil y Juvenil (2009) por “Barro de Medellín”.

Durante cinco horas compartió con los alumnos de Secundaria impresiones y anécdotas sobre la lectura. El autor comenzó hablando del final abierto de la novela, algo que le han criticado mucho de este libro. Como anécdota contó que, cuando fue a defenderlo ante centenares de jóvenes a Cartagena, recibió muchas críticas. Por ello, se sorprendió al saber que era el ganador del premio Hache, pero más aún al leer lo que le habían escrito los chicos: “Hemos votado este libro porque nos ha gustado el final”.

Señaló que este libro surgió de una noticia que había leído en el periódico hacía unos años en la que unos jóvenes, en una noche de borrachera, habían tirado unas piedras desde un puente para asustar a los coches que pasaban por debajo, con el fin de grabarlo con el móvil y colgarlo en Internet. Afortunadamente, no había sucedido nada, pero él quiso preguntarse ¿y si hubiera pasado algo? Así nació la novela. “La vida es algo que me inspira constantemente”, afirmó.

Una de las preguntas más repetidas fue si iba a haber una segunda parte del libro. Alfredo contestó que no, ya que lo que él quería contar ya estaba dicho. Sin embargo, dijo que el libro formaba parte de una trilogía cuyo objetivo es reflexionar sobre el silencio y que posiblemente se llamará Las redes del silencio, cuya segunda novela verá la luz el próximo 2 de abril y que tendrá por título Pasos de marioneta.


También hubo momentos divertidos, como cuando los alumnos de primero le preguntaron que por qué había escrito tantas palabrotas. Él contestó: “las dicen los personajes, no yo”.

Ante la pregunta “¿cómo trabajas?”, explicó que hay escritores que escriben con mapa y otros que escriben con brújula. Los primeros, hacen un mapa antes de empezar a escribir, donde lo tienen todo pensado; los segundos, por el contrario, se dejan llevar por una brújula imaginaria y van haciendo el camino sobre la marcha. “Yo, -señaló- pertenezco a estos últimos”.


Comentó que guarda un especial recuerdo del lanzamiento del libro, pues la editorial se había volcado desde el primer momento con él. “Cuando me llamaron me dijeron: Alfredo, nos ha gustado mucho. A lo que yo respondí que me parecía bien. No Alfredo, –me dijeron- queremos decir que nos ha gustado MUCHO”. “Las dos primeras ediciones se agotaron rápidamente, incluso hicieron un book-trailer. La verdad es que está teniendo un éxito enorme”, indicó.

Alfredo no perdió la sonrisa en toda la mañana. A última hora, aunque ya estaba un poco cansado, supo motivar a los chicos preguntándoles para qué servía  un libro. Algunas de sus respuestas fueron: para escribir y comprender mejor, para evadirte de la realidad, para entretenerte… Y él les regaló unas bonitas frases: “Yo creo que leer es una forma de desarrollar la imaginación” y “los verdaderos lectores leen solo por el placer de leer”, “para mí la literatura es un espejo y una ventana”.

También fue una gran sorpresa para los alumnos de quinto y sexto de Primaria, que este año han creado sendos clubes de lectura en los que están leyendo uno de los libros del autor Mateo y el saco sin fondo, y que tuvieron la ocasión de comentar con él.

Fue una entrañable mañana en la que todos los que tuvieron la suerte de asistir a este encuentro coincidieron en apreciar la cercanía y el cariño que mostró.  Se despidió diciendo: “Me gustaría que este encuentro sirviera para una cosa: para que os anime a leer otro libro”.
2013 - MARÍA MENÉNDEZ PONTE



El pasado jueves 25 de abril tuvimos la suerte de recibir en nuestro colegio a la escritora María Menéndez-Ponte para comentar con los alumnos de 1º, 2º, 3º y 4º de ESO tres de sus novelas: Los posos amargos del café, Maldita adolescencia Nunca seré tu héroe.
Después de diecinueve encuentros en escuelas de todo el mundo y con la voz ya un poco cansada, supo contagiarnos su inagotable energía. “Yo soy muy Rafa Nadal” -repitió varias veces.
Comentó que en todas sus novelas se pueden encontrar anécdotas o reflejos de la vida real pues, para ella, “la literatura que más vale es la que surge del interior”.
De Los posos amargos del café, dijo que era la novela que más le había marcado porque el protagonista es un chico muy conocido y querido por ella con una terrible historia familiar, que acaba metido en el mundo de la droga y que, una vez toca fondo, consigue salir. Contó que este libro había servido de ayuda a mucha gente. Los alumnos se interesaron por cómo había continuado la vida de Bruslí quien, según dijo la autora, ha conseguido tener lo que siempre había soñado, una familia feliz.
En Maldita adolescencia quiso reflejar ese periodo tan complicado como es el de la adolescencia. “Mi hija se ponía tan pesada que su hermano pequeño se quejaba diciendo – maldita adolescente”, contaba. Cuando le preguntaron sobre el personaje de Iván afirmó que “quería salvarlo, pero no pude”. Recordó una entrevista hecha a Gabriel García Márquez en la que le preguntaban lo mismo por el “coronel” en El coronel no tiene quien le escriba y quien confesaba que se había encerrado a llorar después de acabar con él. “Es que hay personajes que tiran de ti y ya no se puede hacer nada”- lamentó María.
Nunca seré tu héroe fue la novela con la que obtuvo el libro de oro 2006, al haber vendido más de 100.000 ejemplares, número que asciende actualmente a 200.000. El perfil del protagonista está basado en su segundo hijo, quien cada noche le pedía que le leyera un poco más de la historia y por ello –dijo- le obligó a que desde el primer minuto los personajes estuvieran vivos. Hubo momentos muy divertidos al explicar los motes de algunos profesores basados en personas reales, como el sátrapa, el puella, el bombilla… Ante la pregunta de si iba a haber una segunda parte del libro contestó: “Andrés lleva unos meses rondando mi cabeza, pero me da miedo retomar la historia. Ha pasado mucho tiempo…”
Todos los que tuvimos la suerte de asistir a este encuentro coincidimos en apreciar la cercanía y el cariño que mostró en todo momento.  Una persona tan carismática y de tanto renombre nacional e internacional, no será fácil de olvidar.
Terminó todas las charlas firmando y dedicando sus libros.  Sólo quedó decirle, “¡Gracias María!, “tú siempre serás nuestra heroína”.



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